Las zapatillas blancas son una tendencia que ha estado acaparando todas las vitrinas durante las últimas temporadas, sin embargo, al usarlas nos enfrentamos a un problema bastante frecuente: se ensucian con gran facilidad.
Pero tranquilo, la posibilidad de ensuciar un poco tus zapatillas no debe limitarte, ya que la limpieza de las mismas es mucho más fácil de lo que seguro puedes imaginar. Es por ello que hemos preparado una detallada guía que te ayudará a mantener tu calzado impecable y siempre en perfecto estado.
Para que tus zapatillas luzcan como si acabases de comprarlas solo necesitas seguir unos pequeños trucos. Quédate junto a nosotros y acompáñanos a descubrir cómo limpiar zapatillas blancas paso a paso ¡y despídete de la suciedad para siempre!
Cómo limpiar zapatillas blancas de tela
Aunque las zapatillas blancas son un componente que no puede faltar en ningún armario, la idea de tener que limpiarlas de manera constante puede parecernos todo un dolor de cabeza. Pero esto no tiene por qué serlo si lo haces utilizando los métodos adecuados, sobre todo si estamos hablando de zapatillas blancas de tela.
“Uno de las formas más acertadas de acabar con las manchas en tus zapatillas (siempre que no estén extremadamente sucias) es haciendo uso de la vieja confiable: la lavadora“, nos dicen desde ElTocadorDeLulu. Para que esto funcione deberás retirar primero los cordones, y utilizar agua fría, este último factor es muy importante, ya que las altas temperaturas podrían ocasionar un desprendimiento de la suela. Configura tu lavadora en el ciclo más corto y deja tus zapatillas secar al aire libre.
Ahora bien, si tus zapatillas están bastante sucias y manchadas un método más efectivo puede ser frotarlas con jabón de Marsella y dejarlas remojando en agua tibia durante algunos minutos. Después de esto, podrás enjuagarlas y si sientes que podrían quedar aún más limpias, intenta probar suerte con la lavadora.
Cómo limpiar zapatillas blancas de piel
Hoy día las zapatillas blancas de piel pueden ser el complemento perfecto que te ayude a triunfar con cualquier outfit. Es por ello que aprender a limpiarlas y darles el tratamiento adecuado es una de las cosas que no puedes dejar de aprender.
Lo primero que debes hacer para mantener tus zapatillas blancas de piel en perfecto estado es cepillarlas de manera suave, así podrás deshacerte de los restos de suciedad que se han adherido a ellas.
Para dejar atrás las manchas y tener unas zapatillas de piel relucientes necesitarás frotar las manchas, esto podrás hacerlo utilizando toallitas para bebés, o tal vez puedas probar con una forma más tradicional: es decir, pasando suavemente un paño húmedo impregnado con jabón neutro. Así mismo, otra de las alternativas más eficaces es la de rociarles agua con un ligero toque de amoníaco.
Posteriormente lo único que tendrás que hacer es dejarlas secar al aire libre. Pero ten cuidado, para evitar daños en tu calzado procura que tus zapatillas sequen bajo sombra. Y si quieres hacerte con un troco adicional, no dejes de utilizar crema incolora para mantener a tus zapatillas con un brillo reluciente.
Cómo limpiar zapatillas blancas con bicarbonato de sodio
Otro de los trucos infalibles que no puedes dejar de probar es el de limpiar tus zapatillas blancas haciendo uso de un ingrediente tan versátil como lo es el bicarbonato de sodio. Si algo podemos prometerte es que se trata de un proceso super sencillo que asegura excelentes resultados.
El bicarbonato es un ingrediente extremadamente económico, podrás conseguirlo en cualquier tienda por menos de 3 euros, y puede ayudarte a solucionar un sinfín de problemas.
Si lo que quieres es decirle adiós a la suciedad de tus zapatillas solo necesitarás mezclar una medida de bicarbonato con media medida de detergente para la ropa.
Una vez que hayas mezclado estos poderosísimos ingredientes, tu siguiente tarea será la de frotar dedicadamente tus zapatillas utilizando como herramienta a un simple cepillo de dientes. Para que este truco sea 100% efectivo, te recomendamos dejar actuar a esta pócima secreta durante un buen rato.
Para hacer las cosas más simples, solo tendrás que meter tus zapatillas blancas en la lavadora y dejarlas en el ciclo rápido. Una vez fuera, solo resta dejarlas secar al aire libre.
Cómo limpiar zapatillas blancas con vinagre y bicarbonato
Aunque se trata de un truco excelente, la única manera de darle uso al bicarbonato de sodio para dejar atrás la suciedad de tus zapatillas blancas no es mezclarlo con jabón. Combinar vinagre y bicarbonato podrá ayudarte a devolverle el brillo a tus zapatillas como nunca lo imaginaste.
Una de las mejores cosas que puede ofrecernos esta potente fórmula casera es que está totalmente libre de agentes tóxicos, por lo que es muy segura de manipular desde casa. Ponernos manos a la obra será de lo más simple, para comenzar deberás unir media taza de vinagre blanco con un cuarto de taza de bicarbonato de sodio.
¡Que lo que verás a continuación no te alarme! Una espuma comenzará a subir, por lo que te recomendamos realizar tu mezcla en un recipiente que posea las medidas suficientes para que se trate de un proceso cómodo. Una vez que la espuma baje, cepilla con este líquido tus zapatillas concienzudamente.
Para obtener los mejores resultados, deja que tu mezcla actúe durante al menos 30 minutos. Y una vez llegada la hora de enjuagarlas, solo deberás sacar el vinagre y el bicarbonato utilizando un trapo húmedo.
Al igual que con los métodos anteriores, nuestra recomendación para secar tus zapatillas blancas es hacerlo al aire libre, preferiblemente bajo la sombra.
Cómo limpiar la suela blanca de unas zapatillas
Otra de las preocupaciones más grandes a las que se enfrentan los amantes del calzado es la de descubrir como limpiar las suelas blancas de una zapatilla, ya que en estas hasta la más mínima mancha puede parecer algo enorme.
Por lo general, muchos suelen limpiar la goma blanca de sus zapatillas utilizando agua y jabón, ya que parece ser lo más lógico. Sin embargo, en contra de todo pronóstico, esto puede perjudicar a nuestro calzado a largo plazo, ya que puede concederle a la suela blanca de nuestras zapatillas un color amarillento poco favorecedor.
¿Quieres conocer la mejor manera de evitarlo? Comienza a usar elementos poco tradicionales como la acetona, frotándola suavemente sobre tu zapato utilizando un trapo, de la misma manera, el alcohol o incluso el agua con una gota de amoníaco podrían ofrecerte resultados increíbles.
Y si te atreves a ir un poco más allá a la hora de innovar, trucos que no podrás dejar de probar es el de usar un borrador mágico para eliminar cualquier resto de suciedad, e incluso tomar un cepillo de dientes y ¿por qué no? También pasta dental y dedicarte a limpiar con ella la suela de tus zapatos hasta hacerla brillar.
Cómo limpiar unas zapatillas de esparto blancas
Las zapatillas de esparto son uno de los tipos de calzado preferidos durante las épocas veraniegas, esto se debe a que son cómodos, económicos y por lo general han sido fabricadas a través de procesos ecológicos.
Sin embargo, al estar hechas a de fibras naturales, limpiar nuestras zapatillas de esparto blanco puede ser un proceso un tanto más complicado que el de asear un calzado tradicional. Pero no te preocupes, a continuación te explicaremos como lograrlo con total éxito.
Lo primero que debes tener presente es que la lavadora está prohibida a la hora de tratar con este tipo de zapatillas debido a la naturaleza de sus materiales. Para liberarlas de cualquier suciedad deberás comenzar cepillando su exterior de manera delicada.
Por otro lado, si estas se han ensuciado con manchas difíciles de tratar, algo que podría ser de gran utilidad es el cubrirlas con polvo de talco que puedan absorber cualquier sustancia indeseada. Para retirarlos, solo tendremos que cepillar nuevamente.
Otra manera bastante eficaz a la hora de limpiarlas, es frotarlas con una esponja utilizando jabón neutro, o nuestra ya conocida mezcla de agua con una gota de amoníaco.
Antes de secarlas, recuerda colocar dentro de ellas un poco de papel periódico, este truco te ayudará a evitar que tus zapatillas de esparto se deformen. Así mismo, no olvides dejarlas al aire libre y mantenerlas alejadas del sol.