En sus horas de recreo y de ocio es habitual que los niños quieran salir a jugar al parque, realizar alguna actividad deportiva o simplemente disfrutar del buen tiempo al aire libre. Tanto si lo que quiere es disfrutar de una actividad tranquila como si necesita liberar toda la energía que lleva dentro, lo más probable es que las zapatillas acaben llenas de polvo y suciedad, sobre todo si ha realizado deporte o si ha jugado en espacios que no destaquen precisamente por su limpieza.
A estas alturas seguro que ya estás más que familiarizado con la limpieza de uniformes, abrigos y calzados. No obstante, puede darse el caso de que te asalten las dudas a la hora de limpiar un determinado tipo de zapatillas, bien por no disponer de los productos exactos recomendados para su limpieza o por no reconocer el material con el que están fabricadas.
Para echarte una mano a la hora de dejar las zapatillas del peque impolutas vamos a hablarte de cómo limpiar adecuadamente cada tipo de zapatilla infantil. ¡Así correrás menos riesgos a la hora de quitarles la suciedad acumulada y podrás dejarlas como nuevas!
Cómo limpiar zapatillas blancas infantiles
Aunque preciosas de entrada, las zapatillas blancas no son las más recomendables para niños, dada la enorme cantidad de suciedad que acumulan y lo rápido que pierden el brillo en su capa exterior. No es que sean las menos higiénicas, una idea errónea pero muy popular que ha ganado peso de manera infundada, pero sí son las que se ensucian con más facilidad.
Ten en cuenta que, aunque te veas tentado de utilizar productos como lejía o blanqueantes en gel que pueden dar buenos resultados en prendas como camisetas o pantalones, no son aptos para calzado. Son enormemente corrosivos y pueden provocar desperfectos irreparables, así que mantenlos alejados. En su lugar, haz uso de otros productos con un poder blanqueante similar pero mucho menos dañinos para los compuestos sintéticos que conforman el tejido de la zapatilla.
Lo primero que debes hacer es mezclar 60 gramos de bicarbonato sódico con media taza de vinagre blanco. Con la ayuda de un cepillo, aplica la solución sobre el contorno de la zapatilla para retirar toda la suciedad acumulada. Si ves que se produce una especie de sustancia espumosa que no termina de desaparecer, déjala actuar: el poder limpiador del bicarbonato es muy potente, y la presencia de las burbujas delata la ubicación de la suciedad más incrustada, así que lo mejor es dejarlo actuar.
Para manchas importantes o especialmente difíciles de quitar, deja actuar el compuesto durante media hora para que sea más fácil retirar con el cepillo. Los resultados son inmejorables y los riesgos que han corrido las zapatillas, nulos.
Algunas de las zapatillas blancas para niños que puedes encontrar en el portal ZapatillasNiños.com, website especializado en la comparación de las mejores zapatillas infantiles del mercado, cuentan con un revestimiento extra que repele el polvo y evita la incrustación de suciedad, simplificando las labores de limpieza es
Cómo limpiar zapatillas de ante de niños
Uno de los materiales más apreciados para la fabricación de botas, botines y zapatillas es el ante, por la suavidad que proporcionan al tacto. Sin embargo, las manchas son dificilísimas de quitar y hay una alta probabilidad de que utilices un producto que deje la zapatilla en peor estado que cuando estaba manchada.
Te conviene saber que no existe un producto universal para limpiar el ante y que debes utilizar una serie de elementos combinados que varía en función del origen de la mancha. Aceite, polvo, tierra incrustada… ¡hasta el agua es capaz de dejar manchas en el ante!
Lo más seguro sea que te haga falta un cepillo, pero no uno cualquiera: debes buscar uno especialmente diseñado para emplear sobre este tejido en particular. Después, en función de cómo sea la mancha, tendrás que retirar los excedentes con papel absorbente o no, además de utilizar un pequeño peine para retirar los posibles restos sólidos que hayan quedado adheridos a su superficie.
Los sprays desengrasantes son una buena alternativa para quitar manchas de aceite, pero deben aplicarse en su justa medida para no crear una capa de espuma demasiado espesa.
Cómo limpiar zapatillas blancas de tela de niños
Las zapatillas de tela generan sentimientos encontrados entre quienes las poseen, ya que por un lado son extremadamente cómodas y fáciles de poner y quitar, pero por otro lado absorben la suciedad con suma facilidad, sobre todo las manchas de barro y líquidos.
Lo mejor en estos casos es recurrir a la mezcla de bicarbonato de sodio y vinagre que te comentábamos antes, solo que antes de frotar con el cepillo es conveniente dejarlo actual. Retira la sustancia enjuagando con agua y trata de no frotar la tela para no expandir la mancha.
Cómo limpiar zapatillas de piel infantiles
El uso de un paño húmedo y jabón con pH neutro (para evitar que la piel sufra daños por un nivel de acidez descompensado) es la mejor solución para eliminar las manchas en la piel. Por suerte, estamos hablando de un material que suele repeler bastante bien los líquidos, por lo que solamente debes preocuparte de retirar la tierra incrustada, las salpicaduras de barro o las solidificaciones de cualquier otro material.
También puedes hacer uso de espuma para piel, aunque no está recomendada para ciertos modelos de zapatillas. Cualquier producto químico que utilices para la piel úsalo primero sobre una zona más disimulada de la zapatilla y en muy pequeña cantidad para que, en caso de que cause algún desperfecto sobre la superficie, este no afecte a la zapatilla en su conjunto y quede lo más disimulado posible.
Cómo limpiar la goma amarilla de las zapatillas
Esta cuestión es más peliaguda. Si la goma de las zapatillas está hecha de silicona, va a ser muy difícil eliminar esa antiestética capa de color amarillo, ya que la silicona es un material extremadamente poroso que absorbe gran cantidad de polvo y suciedad de su entorno. Incluso limpiándola a diario, la silicona adquiere un tono amarillento con el tiempo, así que no trates de evitarlo porque, por desgracia, todos los esfuerzos van a ser en vano.
Pero lo que sí se puede hacer es retirar la capa amarilla de la goma de las zapatillas que separa la suela de la tela. Estas gomas, presentes en otras partes de las zapatillas en según qué modelos, pueden limpiarse con la conocida mezcla hecha a base de bicarbonato y vinagre, cepillando levemente tras su aplicación durante unos pocos minutos.
Cómo limpiar zapatillas de lona de niños
Muy recomendadas por su comodidad, las zapatillas de lona son también muy fáciles de limpiar. Pueden sumergirse en agua fría con abundante sal, debiendo estar esta bien disuelta para evitar incrustaciones que después resulten molestas. Con dejarlas poco menos de media hora, las zapatillas recuperarán su brillo original y estarán listas para volver a ser utilizadas tras su secado.