La campana extractora es uno de los elementos de la cocina que está sometido a un mayor desgaste y a los olores y la grasa de los alimentos. Además puede recibir todo tipo de salpicaduras y es por ello que mantenerla en óptimas condiciones es fundamental para proteger la salud e higiene alimentaria de toda la familia y para conservar la cocina en un óptimo estado de limpieza. A continuación te presentamos los mejores consejos para que sepas cómo limpiar la campana extractora y eliminar la grasa y la suciedad.
Cómo limpiar la campana de la cocina
Mantener la campana de la cocina en óptimas condiciones es fundamental para poder cocinar garantizando la higiene de todos nuestros platos. Además es básico realizar un óptimo mantenimiento del extractor de humos para garantizar su buen funcionamiento. En caso contrario el extractor no podrá aspirar el humo ni extraer la grasa, que quedará suspendida en el ambiente y hasta podrá llegar a expandirse por el resto del hogar. Además, si la cocina es abierta la limpieza de la campana es todavía más importante para conseguir mantener el aire limpio y en las mejores condiciones posibles.
Para empezar con la limpieza de la campana extractora y conseguir eliminar toda la grasa y la suciedad, lo primero que debes tener en cuenta es si se trata de una campana de extracción o de recirculación, porque como los filtros son diferentes la limpieza también tendrá que serlo.
En cuanto a las campanas de extracción de humos, existen muchas opciones diferentes: las campanas más clásicas, las encastradas o las decorativas como los modelos que podemos ver en esta recopilación de cocina10.com/mejores-campanas-extractoras-decorativas/, dónde encontramos las mejores campanas extractoras decorativas del momento, ideales para las cocinas más chic y estilosas. En este caso debemos tener en cuenta que estas campanas llevan el humo, el vapor y los olores al exterior mediante un tubo que las conecta con la fachada. Con estas campanas es complicado revisar si están sucias, con lo que es fundamental que las limpiemos de forma regular si solemos cocinar diariamente en casa.
Del mismo modo, es importante tener en cuenta que la campana debe limpiarse siempre fría, cuando llevemos horas sin usarla, y no después de terminar de utilizarla. Para limpiarla habrá que retirar los filtros anti grasa. Son una especie de mallas que pueden retirarse de forma sencilla en la mayoría de casos. Casi todos los modelos cuentan con una pestaña que permite sacar el filtro sin problemas.
Para limpiarla te recomendamos ubicar estos filtros en una mezcla de bicarbonato, agua caliente y algo de vinagre blanco o de zumo de limón. En su defecto el quita grasas también será una buena alternativa. Para los filtros más sucios te recomendamos usar también amoníaco.
Después de esto enjuágalos con agua caliente y límpialos con algo de agua y jabón. Antes de colocarlos deja que se sequen bien para evitar complicaciones. Del mismo modo, debes saber que algunos filtros pueden lavarse en el lavavajillas.
Cuando ya tengas listos los filtros llega el momento de limpiar el exterior de la campana extractora. Para ello debes evitar siempre el utilizar productos abrasivos o estropajos que puedan dañar su superficie, sobre todo si se trata de una campana de acero inoxidable. La mejor alternativa es utilizar un paño húmedo con algo de bicarbonato. Para secar puedes utilizar sencillamente papel de cocina.
Del mismo modo, para las campanas extractoras de recirculación debemos tener en cuenta la importancia de la limpieza de los filtros anti grasa y de los filtros de carbón activo. Los filtros anti grasa puedes limpiarlos como te hemos indicado en el punto anterior para las campanas de extracción. Para los filtros de carbón activo debes valorar que no sólo habrá que limpiarlos, sino que habrá que cambiarlos cada cuatro meses o cada medio año si no utilizamos mucho la campana.
Para cambiar estos filtros tendrás que retirar la cubierta exterior que suele estar atornillada y después sacar los filtros tirando de ellos. En el espacio disponible podrás colocar los nuevos filtros. Además deberías limpiar también la cubierta antes de volver a colocarla y atornillarla.
Por último, para limpiar la campana por dentro y mantener el tubo y el motor en el mejor estado posible, los expertos recomiendan llenar una olla con agua y vinagre, conectar la campana y dejar hervir la mezcla durante media hora. De esta forma, el vapor permitirá que la grasa del interior y toda la suciedad salgan fuera. Así será posible mantener la campana en óptimas condiciones, eliminar el humo, la grasa, los vapores y los olores con garantías. Además, para el mantenimiento diario lo mejor que puedes hacer es pasar un paño para retirar la suciedad superficial tras cada uso y limpiar los filtros una vez cada quince días.